Comenzar un negocio requiere de una inversión económica que puede ser mayor o menor en función de como se planifiquen las cosas. Hay aspectos en los que es realmente complicado ahorrar dinero, por ejemplo en el pago de tasas que son obligatorias y tienen un importe fijo. Como mucho, se puede ahorrar el dinero que se pagaría a una gestoría haciéndolo uno mismo, pero con el riesgo de olvidar algún papel y acabar sufriendo consecuencias.
Pero hay otros aspectos en los que sí es posible ahorrar dinero. Por ejemplo, si no se necesita de una oficina para recibir clientes, montar un despacho en casa hará que se ahorren muchos gastos de alquiler y que incluso se pueda deducir un porcentaje del IVA en el pago de los servicios. Para esto, la vivienda tiene que estar dada de alta como lugar de trabajo, algo fundamental para poder llevar a cabo esta deducción de manera legal.
También se puede ahorrar en la compra de los vehículos. Existen una gran oferta de vehiculos industriales de segunda mano que proceden de negocios que no llegaron a salir adelante. Se trata de coches o furgonetas con muy pocos kilómetros y que tienen una considerable rebaja en el precio respecto a su compra nuevos. Si se adquieren en un concesionario o en una compraventa oficial con factura, este gasto puede incluirse entre los amortizables de la empresa y por tanto, además de ahorrar dinero en la compra se podrá deducir una parte del IVA.
Ahorrando en el local y en la compra del vehículo, la mayoría de los negocios van a recortar gran parte de los gastos principales, por lo que la inversión inicial va a ser muy baja y será mucho más factible comenzar con la actividad empresarial sin tener que esperar a reunir un gran capital para evitar préstamos demasiado cuantiosos que, sobre todo al principio, pueden ser complicados de devolver.
En lo que no se debe de regatear es en las herramientas de trabajo principales, que siempre deben de ser de muy buena calidad para ofrecer al cliente un servicio eficaz y perfecto. Así, estarán satisfechos y funcionarán como nuestros mejores embajadores, al recomendarnos a amigos y familiares, una de las mejores maneras de promoción para cualquier negocio que comienza y que necesita hacerse con una agenda de clientes inicial con la que comenzar su andadura.